Organizar un año en el extranjero de la mejor manera posible no es fácil. Ir por libre intentando ahorrar dinero o confiar en una agencia especializada: ¿cuál es la opción más ventajosa? Aquí tienes todos los pros y los contras que debes tener en cuenta antes de decidirte por un año en el extranjero sin agencia.
P lanificar una experiencia como un año en el extranjero sin agencia requiere energía, compromiso y determinación; hay que encontrar los contactos y canales adecuados y, sobre todo, se necesita un poco de suerte. En resumen, ir por libre puede ser una apuesta arriesgada. Pero confiar en una agencia con programas en el extranjero también puede presentar incógnitas.
Si todavía está decidiendo qué camino tomar para su año de intercambio, hemos recopilado las ventajas y desventajas de los dos escenarios para ayudarle a tomar la decisión realmente correcta para usted.
Las ventajas de pasar el año en el extranjero con una agencia
Asistencia previa a la salida
Una gestoría puede ayudarte a solucionar todas las cuestiones burocráticas que hay que resolver: el miedo a no rellenar todos los documentos necesarios, a no cumplir los plazos, a no entender los procedimientos que hay que seguir es más que fundado, sobre todo para los no iniciados. ¿Un par de ejemplos? Solicitar y obtener un visado y comprar el billete de avión más barato en una fecha fija.
Costes claros y transparentes
Los que deciden organizar una experiencia como la de pasar un año en el extranjero por su cuenta pueden fijarse un presupuesto para invertir, pero no están seguros de si podrán cumplirlo hasta el final del año en el extranjero. Tener una idea clara desde el principio de cuánto se va a gastar le permite saber lo que puede y lo que no puede permitirse sin encontrarse con desagradables emergencias financieras.
Seguro de viaje y anulación
Siempre puede ocurrir lo inesperado. El seguro de viaje es una solución que contiene daños. Puede adquirirse de forma independiente, pero es muy conveniente disponer de un paquete ad hoc, proporcionado por una agencia, que cubra los gastos de enfermedad, accidentes o lesiones, repatriación por razones médicas y responsabilidad civil para personas y bienes.
Además, existen seguros que permiten no perder el importe gastado en caso de no poder irse, por ejemplo cuando se termina el curso escolar con una deuda educativa que recuperar.
Formación para los hijos
Prepararse para una nueva aventura como un año en el extranjero es delicado. Tener la oportunidad de participar en sesiones de formación en las que se aborden temas esenciales como la adaptación a la familia, el sistema escolar del país de destino y los aspectos culturales y emocionales de la experiencia puede ser de gran ayuda.
En estos momentos, además, los jóvenes se conocen y se dan cuenta de que forman parte de una red de estudiantes internacionales (una conciencia que les ayuda en caso de dificultades en el extranjero), intercambian contactos y confrontan expectativas y emociones.
Formación para padres
Los padres de los niños también tienen una experiencia difícil. Conocer a otras familias y enfrentarse a un equipo de expertos, disponer de manuales o de un curso de formación en línea dedicado a ellas puede tranquilizarlas y prepararlas para la experiencia que van a compartir con sus hijos.
Empezar con una base emocional sólida
Muchas agencias organizan entrevistas para evaluar la aptitud y la motivación de los jóvenes para irse un año al extranjero. Analizar con un psicólogo cuáles son los puntos fuertes y débiles de cada uno permite saber si se está tomando la decisión correcta.
Participar en un programa escolar en el extranjero es emocionante y enriquecedor, pero no es una experiencia fácil. Uno tiene que ser capaz de hacer frente a las distintas situaciones que se le presenten en el camino, y salir sin agencia no permite estar seguro de la propia preparación.
Recepción en el aeropuerto
Tener a alguien en el aeropuerto a la llegada a un nuevo país es tranquilizador, sobre todo si el viaje es largo y con varias escalas. Salir por la puerta grande y contar con alguien que ayude a orientarse facilita el impacto con la nueva realidad, haciéndolo menos exigente y más agradable. Si el primer impacto es suave, uno tiene más energía para empezar una nueva experiencia en el extranjero.
Asistencia durante la estancia
“¿A quién pediré ayuda en caso de necesidad? Si tengo problemas, ¿tendré a alguien a quien recurrir?”. Responder a estas preguntas es fácil si se confía en una organización especializada: el apoyo de una agencia que presta asistencia a miles de estudiantes cada año es un valor añadido nada desdeñable. Saber que puede contar, en España, con un equipo experto que ha vivido la experiencia en el extranjero de primera mano y que se ocupa a diario de la dinámica de este tipo de estancias le permite marcharse con mayor tranquilidad.
Si además hay representantes locales que viven en el extranjero, disponibles 24 horas al día, 7 días a la semana para prestar ayuda in situ, las emergencias dejan de ser intimidantes.
Escuela y familia
Uno de los aspectos más importantes de un año en el extranjero es encontrar una escuela que se adapte a tus necesidades y una familia de acogida acogedora y abierta a la comparación. Al elegir un socio fiable, es más probable que encuentre un entorno cómodo para su vida cotidiana.
Apoyo escolar
Algunas agencias se comprometen a facilitar la comunicación entre el estudiante de intercambio y la escuela española: en el momento de la inscripción, entregan a la institución un certificado oficial que acredita la participación del estudiante en un programa en el extranjero reconocido por el MIUR, realizan un seguimiento del progreso académico del estudiante en el extranjero y, antes del regreso, comunican qué documentos son necesarios para una correcta reincorporación a la escuela (certificados, boletín de notas, certificados de actividades realizadas…).
De este modo, el año en el extranjero no supone un abrupto paréntesis en el ciclo de bachillerato, sino que se integra mejor en la trayectoria educativa del estudiante.
Año en el extranjero sin agencia: ¿qué ventajas tiene?
Antes de dejarte abatir, hazte estas preguntas e intenta responderlas con sinceridad:
Visitas a amigos y familiares
Al irse con una agencia, la mayoría de las veces a los que están en el extranjero no se les permite recibir a amigos y padres y no pueden volver a casa durante toda la duración del programa, ni siquiera para las vacaciones de Navidad. La razón es que esto facilita la integración en la realidad local y les permite vivir plenamente el año en el extranjero.Algunos jóvenes, sin embargo, pueden ser lo suficientemente maduros como para compartir la belleza de la experiencia con sus seres queridos sin desmerecer lo que están viviendo. Otros, en cambio, pueden necesitar volver por motivos personales y no deben renunciar a marcharse.
Costes más bajos
El coste de un programa escolar en el extranjero suele ser un punto delicado. Elegir una agencia especializada es más caro que organizarse uno mismo, pero hay que valorar si la diferencia de precio -a menudo no tan significativa- merece la pena o no: las horas de trabajo y la inversión de energía dedicadas a preparar la experiencia son muchas y no deben minimizarse. Si se empieza con una agencia, hay que considerar sus servicios y lo que realmente incluye la cuota de participación, y sólo entonces valorar si merecen la pena o no.
Elección del destino
A veces, la elección presentada por una agencia puede ser limitada. Los destinos menos populares, pero no por ello menos interesantes, no siempre están presentes en los programas propuestos. Por ejemplo, si uno quisiera ir a Canadá o Estados Unidos, no habría problemas. Sin embargo, podrían surgir problemas si uno quisiera ir a Finlandia, Camboya o Perú.
Calendario menos rígido
Con una agencia, a menudo es necesario iniciar el procedimiento de solicitud con mucha antelación y respetar los plazos fijados para evitar no encontrar plaza en el país donde se pretende pasar el año en el extranjero. Sin embargo, averiguar si realmente quieres pasar por una experiencia así y si estás preparado para ello puede llevar más tiempo del que dicta una organización.
¿Un año en el extranjero sin agencia? La elección es suya.
Ambas opciones, pasar un año en el extranjero sin agencia o elegir una organización especializada, tienen ventajas e inconvenientes. No existe la mejor solución, sino simplemente un camino más o menos adaptado a las necesidades y posibilidades de cada uno. Irte por libre te da más libertad, es cierto, pero el compromiso de invertir para que todo funcione es mucho mayor. En cambio, confiar en una agencia infunde más seguridad y permite afrontar la aventura del año en el extranjero con serenidad. Y esto va más allá de cualquier cuestión de precio.
¿Crees que estás preparado para estudiar en el extranjero? Aquí tienes un reto para averiguar la respuesta.
